El desafío de rediseñar una de las marcas más queridas por las familias argentinas.

Desde hace años, nuestra relación con Savencia Argentina ha sido un pilar fundamental en proyectos de gran éxito, incluyendo el desarrollo de Milkaut, Bavaria y Adler. Este vínculo de confianza y colaboración nos permitió embarcarnos en un desafío emocionante: rediseñar Ilolay, una marca icónica para muchas familias argentinas.

Hace dos años, Savencia nos contactó en una etapa temprana de un sueño aún por concretarse: la adquisición de Ilolay. Desde el minuto cero, antes de que la compra se formalizara, el equipo de Savencia quiso que estuviéramos a su lado, anticipando los pasos necesarios para hacer de este proyecto un éxito.

Gonzalo Berro tuvo la oportunidad de reunirse con José Williner, ex CEO de Ilolay y miembro de la familia fundadora, para compartir la visión de Savencia: no solo adquirir la marca, sino honrar su legado y llevarla a un nuevo nivel. Lejos de reducir o simplificar su esencia, el objetivo era darle un nuevo valor, respetando su historia y proyección.

A medida que avanzaban las negociaciones, trabajamos de la mano con el equipo senior de Savencia para diseñar el nuevo branding, con la convicción de que un cambio profundo y bien fundamentado debía estar listo para el momento en que la compra se concretase.

La primera gran interrogante fue: ¿qué significa Ilolay? El nombre no es simplemente una invención, sino que está basado en una flor especial de una leyenda del norte argentino. Este concepto fue clave para definir la esencia del rebranding: el ‘florecer’. Así, modernizamos el logo, ajustando la tipografía y añadiendo la flor en el interior de la letra “o”.

Para capturar la singularidad de esta flor, realizamos un estudio exhaustivo de centenares de flores blancas, creando con inteligencia artificial una flor exclusiva de cinco pétalos, que transmite elegancia, simplicidad y la conexión natural de Ilolay con la pureza de su origen.

El diseño del packaging refleja esta misma esencia natural. Incorporamos imágenes de los productos en su entorno natural: campos abiertos, llenos de flores y mariposas, y, por supuesto, la vaca que simboliza el origen de la leche. Todo esto crea un ambiente armónico que celebra el lugar de donde nace Ilolay.

Finalmente, el nuevo claim de la marca: “Florece lo bueno” encapsula la idea de una marca con más de 95 años de historia que se renueva, floreciendo una vez más para llevar lo mejor de sus productos a los hogares de Argentina.